LA HIPERINFLACIÓN ALEMANA, ¿FUE EL TRATADO DE VERSALLES SU DETONANTE?


La hiperinflación en Alemania durante la década de 1920 es uno de los eventos económicos más notorios en la historia mundial. Este periodo de inflación extrema tuvo consecuencias devastadoras para la economía alemana y tuvo un impacto significativo en la política y la sociedad de la época.


Fueron muchas los factores que dieron lugar a este terrible suceso, sin embargo el más significativo fue el Tratado de Versalles.

¿Cómo se llegó a esta situación?

Después de la Primera Guerra Mundial, Alemania fue obligada a firmar el Tratado de Versalles en 1919. De las muchas disposiciones del tratado, una de las más importantes y controvertidas estipulaba que las Potencias Centrales   aceptasen toda la responsabilidad moral y material de haber causado la guerra y,  deberían  realizar importantes concesiones territoriales a los vencedores y pagar exorbitantes indemnizaciones económicas a los Estados victoriosos.

Como consecuencia del final de la guerra, el pago de las reparaciones, la deuda y las necesidades básicas, la República de Weimar empezó a imprimir lo que se conoce como Papiermark. Aquel dinero no tenía oro que lo respaldara ni se podía convertir en oro. Es decir, carecía de valor porque no tenía detrás su equivalencia en oro. Alemania fabricó más papel moneda que oro conservaba en el Deutche Bundesbank. De esta manera la República de Weimar rompió con el esquema patrón oro.

El pago de las reparaciones de guerra a Gran Bretaña y Francia suponía un gasto de miles de millones de marcos. A esto hay que añadir la imposibilidad de pagarlo a plazos y la herencia del gobierno imperial con una moneda depreciada. Tampoco tenían reservas de oro y los ingresos alemanes eran deficitarios. Todo ello hizo que el Papiermark se depreciara cada hora que pasaba.

A principios de 1921 el cambio de marco por dólar se situaba en 60 a uno. Las cosas cambiaron en mayo de ese año. En aquella fecha Londres le envió un ultimátum a Alemania. Demandó el pago de dos billones de marcos de oro anuales. Esto equivalía al 26% de las exportaciones alemanas. En agosto de 1921 se hizo la primera entrega de la deuda. Eso provocó una devaluación del marco. Si en marzo el cambio era 60 a uno, en noviembre paso a ser 330 a uno. En total Alemania debía pagar 132 billones de marcos de oro. Ni por causalidad tenía esta reserva de oro en el Deutche.

Como solución a todo aquello se decidió imprimir papel moneda sin el apoyo del esquema patrón oro, por lo que la emisión de papel moneda sin respaldo en oro había servido exitosamente al gobierno de la República de Weimar como herramienta de "defensa", al pagar las reparaciones a las potencias vencedoras con dinero devaluado. Todo fue relativamente bien hasta finales de 1922, pero cuando el mercado financiero internacional se percató de la acelerada devaluación del marco alemán a inicios de 1922, franceses, belgas, y británicos exigieron el pago en recursos naturales (madera, carbón, trigo), imponiendo una presión más severa sobre la economía alemana.

Además, en 1923, Alemania dejó de liquidar el pago de las reparaciones por lo que Francia y Bélgica invadieron la región del Ruhr para reclamar lo que sentían que se les debía. El Ruhr era una zona industrial que producía grandes cantidades de carbón y acero. Esta ocupación del Ruhr empeoró la crisis económica de Alemania, ya que perdió una región lucrativa.
El gobierno alemán ordenó a los trabajadores del Ruhr que realizaran una huelga general y los alentó. Imprimieron dinero extra para poder pagar a los trabajadores mientras estaban en huelga, ya que lo hacían a pedido de su gobierno.

 Esto causó hiperinflación. Los precios se dispararon y el valor del dinero disminuyó rápidamente. El valor de los ahorros de la gente perdió su valor y las personas con ingresos fijos quedaron en una posición difícil, ya que sus salarios no aumentaron en consonancia con la hiperinflación.

La solución del problema fue el Rentenmark. El economista Hjalmar Schacht, llegó a una solución. Como no tenía oro para poder imprimir bajo el patrón oro, decidió realizar una hipoteca sobre las tierras y bienes industriales alemanes. Esto suponía que el dinero volviera a tener valor. Se imprimieron millones de Rentenmark. Así, para comienzos de 1924, el tipo de cambio entre el Rentenmark era de 4.2 dólares aproximadamente, pasando la hiperinflación a ser una pesadilla del pasado.


Comentarios

  1. Un recordatorio de la importancia de aprender de la historia para construir futuros financieros más estables. 📜💡

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